Para ayudaros a preparar vuestro acuario y tener perfecta vuestra pecera para que los peces se sientan en ella estupendamente hemos preparado una ficha práctica que os ayudará con su instalación y os permitirá verificar si disponéis de todo el material necesario que debe haber en un acuario.
De los accesorios necesarios de un acuario, hay algunos de ellos que ya están montados directamente en el propio tanque, mientras que otros solo se utilizan en momentos puntuales, pero es necesario tenerlo. Además de enumerarlos hablaremos de la utilidad de cada uno de ellos para conocer las ventajas de tenerlos.
Calentadores
La función de los calentadores para peceras es regular la temperatura del agua para que ésta esté a la temperatura ideal para tus mascotas. Este accesorio es imprescindible y muy práctico, porque no solo ayuda a alcanzar la temperatura ideal, sino que ayuda a mantenerla. El mejor tipo de calentador es el sumergible con termostato.
Este accesorio funciona con acumulación de calor, así que si vas a sacarlo para algo mucho cuidado porque puede quemar. Lo ideal es que lo apagues unos minutos antes de sacarlo para evitar riesgos. Igualmente evita que el calentador entre en contacto con el cristal, porque el calor acabará resquebrajándolo.
Termómetros
Muchos deciden no colocar un termómetro aprovechando que el calentador ya presenta un termostato, pero en caso de no tenerlo no podremos saber si el calentador funciona correctamente. Y es que es importante comprobar periódicamente que el agua está a la temperatura ideal, porque esta razón es una de las principales responsables de las enfermedades y muertes de peces.
Por cierto, mucho cuidado con colocar termostato y calentador juntos. La temperatura que mida el termómetro no será real en ese caso. Debemos colocar cada elemento en un extremo de la pecera para asegurarnos que la medición se realiza perfectamente.
Plantas
Éstas no son accesorios propiamente dichos, pero presentan un aspecto práctico de mucha utilidad. Y es que la vegetación acuática nos ayuda a mejorar la oxigenación del agua, por lo que es importante contar con algunas plantas en nuestra pecera. Esta importancia es aún mayor cuando tenemos un acuario con muchos peces.
Las plantas convierten el dióxido de carbono de los peces en oxígeno a través de la fotosíntesis, con la ayuda de los rayos de luz. La luz natural es la más adecuada para ello, aunque es posible forzar artificialmente la fotosíntesis con la ayuda de lámparas especiales.
Existen tres tipos de plantas para utilizar en la pecera: las sumergidas, las semisumergidas y las flotantes. Mucho cuidado con ellas porque pueden transportar plagas, así que es recomendable lavarlas para eliminar caracoles, hidras u otros huéspedes.
Filtros
El agua de la pecera debe circular sin interrupciones, porque ello hace que ésta permanezca limpia de impurezas y ayuda a su depuración. Un agua sin filtros (o con ellos estropeados) se pondrá sucia rápidamente. Además de esta función, los filtros también proporcionan oxígeno al agua de la pecera, algo que compensa el oxígeno que las plantas consumen de noche, cuando no reciben luz solar.
Hay varios tipos de filtros entre los que podemos optar: filtros internos, externos cerrados y externos abiertos. El interno es el más complicado de manipular, pero hace menos ruido. Los externos son más ruidosos y le restan estética a la pecera. Para terminar decir que los filtros necesitan de una limpieza periódica para trabajar eficazmente.
Redes
Este tipo de accesorio es importante no olvidarlo porque en un momento u otro tendremos que coger a los peces para sacarlos de la pecera. Ya sea por una visita al veterinario o por un cambio de agua en la pecera, es importante tener una red para el transporte de los peces.
Luces
Además de su función decorativa, las luces del acuario ayudan a los peces a mantener un ritmo natural como el que tendrían en estado salvaje, controlando un ciclo de encendido-apagado. Este ciclo debe ser de 10 a 12 horas de luz al día. Utilizando un temporizador este ciclo se puede simular sin tener que preocuparse.
Igualmente la luz de la pecera ayuda a las plantas a realizar la fotosíntesis, lo que les ayudará a crecer y a generar oxígeno.