Tener un acuario puede ser una experiencia maravillosa porque mirar sus peces puede crear en nosotros una sensación de paz enorme, ayudándonos a reducir el estrés y los nervios del día a día. Pero para disfrutar de todas estas ventajas debemos tener clara ciertas nociones del mantenimiento de los acuarios, porque de lo contrario el sueño se convertirá en pesadilla y todo lo que puede ir mal, irá mal.
Por desgracia no podemos ofrecerte una información exhaustiva de todos los detalles que debes cuidar, pero sí te ofreceremos una serie de consejos prácticos para colocarte en la buena dirección. Poco a poco la práctica y toda la información que puedas conseguir en libros/internet/amigos te ayudará a mejorar.
Colocación del acuario
Gracias a las técnicas modernas y muy estudiadas de iluminación, no es necesario colocar el acuario al lado de la ventana para que reciba la luz directa del sol. De hecho hacerlo provoca el crecimiento de algas poco estéticas. Por ello lo ideal es colocar el acuario alejado de la ventana donde éste reciba la menor iluminación directa posible.
Para compensar esa falta de luz colocaremos una luz especial para la pecera y un temporizador automatizado de encendido-apagado para imitar el efecto del sol. Los peces necesitan al menos 10 horas de luz al día y nunca más de 12. Así que ya vemos que podemos colocar el acuario incluso en una zona oscura de la casa, siempre y cuando tengamos un enchufe para las luces cerca. Esto es ideal para revalorizar la decoración de nuestra casa.
Mueble del acuario
El mueble sobre el que descanse el acuario por supuesto debe ser completamente estable. Las peceras pequeñas puedes colocarlas incluso en una estantería o en una mesa, pero las más grandes (de 80 a 100 litros) necesitan de un mueble especial.
Por supuesto el nivel del suelo debe ser perfectamente horizontal. Para compensar posibles problemas de nivel en el suelo podemos colocar entre el acuario y el mueble una capa de poliuretano Polysoft. Ésta además ayudará a aislar el acuario de posibles fugas térmicas del fondo.
Tamaño del acuario
Las condiciones de vida en un acuario son más estables cuanto más grande sea éste. Igualmente en las peceras grandes los pequeños errores de mantenimiento que podamos cometer tienen menos efectos devastadores que en las pequeñas. Por ejemplo, en un acuario grande si olvidamos una vez renovar parcialmente el agua del acuario, las consecuencias se notarán mucho menos que en un acuario de dimensiones reducidas.
No obstante, didácticamente es mejor comenzar con un acuario de dimensiones reducidas para estar mucho más pendiente de todos los cuidados básicos que necesita una pecera. Estos nos ayudarán a ser más meticulosos y aumentar nuestro compromiso. Lo que te recomendamos, por tanto, es que comiences con un acuario de al menos 60-80 cm. de largo.
Instalación del acuario
Lo primero que tenemos que hacer al colocar el acuario en el lugar que deseemos es limpiarlo con agua del grifo tibia sin usar ningún tipo de detergente. El siguiente paso será preparar el suelo del acuario. Para ello colocaremos una capa de 2cm de grava no lavada de una granulometría de 2-3 mm mezclada con fertilizante. Puedes encontrar mezclas de suelos ya preparadas en las tiendas. Posteriormente recubre esta primera capa con otra de grava de acuario lavada de granulometría de 2-3 mm.
Lo siguiente será colocar el filtro y el calentador del agua, siempre siguiendo las instrucciones del fabricante. Colócalos en el fondo de la pecera y posteriormente serán disimulados por los objetos decorativos. Éstos serán los siguientes en el acuario, por cierto. Puedes utilizar por ejemplo raíces y piedras, ligeramente enterradas en el suelo.
Una vez colocados todos los objetos de la pecera pasaremos al llenado del acuario. Éste lo haremos con agua del grifo a una temperatura de 25 grados aproximadamente. Para que el suelo nutritivo no se mezcle con el de grava no permitas que el chorro de agua caiga directamente sobre el agua, y utiliza un plato o un cristal a modo de pantalla.
Una vez el acuario lleno, procede al encendido de todos los aparatos e instala la iluminación. Cuando pasados unos días veas que los aparatos funcionan bien es momento de colocar las plantas acuáticas. Y unos días más tarde ya por fin instalaremos a nuestros preciosos peces.